derechos del niño


 

 

Yo, en realidad siempre pensé que los derechos son muy importantes, si se cumplen. Que los derechos eran pensados para los niños pero quienes deben respetarlos son los adultos. Siempre pensé que los chicos tenían derechos que se proclaman, esa es la parte más fácil, pero no se cumplen. Yo creo en las necesidades de los chicos, necesidad de ser amado, necesidad de tener un nombre, una nacionalidad, necesidad de ser oído, respetado, necesidad de no ser abusado, necesidad de jugar y divertirse, de ser niños, todo lo niños que puedan, que quieran y que deban ser.

Las necesidades no son ignorables, los derechos sí.

Un niño del África tiene derecho al agua sin embargo, por año mueren miles de niños de sed, los adultos no deberíamos vivir creando derechos, sí más cántaros con agua 

Enrique Martínez Reguera

 

 

 

Sobre la Convención de los Derechos del Niño solo podemos decir que es una buena declaración que asegura la dependencia del niño de los adultos, sobre todo de los padres. 
En la práctica se trata de negarles derechos  usando para ello diferentes motivos más o menos establecidos (el orden moral, la religión, la protección etc.) , sobre todo con el argumento que todo eso se hace “por su propio bien”.

 

"He aquí un defensor de los derechos: los defiende tan bien, para que nadie pueda disfrutar de ellos."

 

Seamos serios ¿Qué derecho a libre asociación tiene un niño si para salir de casa necesita el permiso de sus padres?

¿Acaso una persona que depende económicamente de alguien puede decidir algo en su vida sin que el otro se lo conceda?

¿acaso puede ir a vivir con quien le plazca? ¿puede vivir su sexualidad como le plazca? ¿puede decidir por si mismo y sin la complicidad de sus padres faltar a clase o desecolarizarse?

No nos engañemos.

Los niños siguen siendo el grupo más reprimido. A pesar de otorgarles muchos derechos, se les trata como algo que sólo después de someterse a años de adiestramiento  puede ser considerado como plenamente humano. Se les quita a los niños la posibilidad de tener voz, suponiendo que tal y como son no puede participar activamente en la construcción del mundo. Tienen que callar cuando los adultos no quieren escuchar y hablar cuando los adultos quieren arrebatarles  sus secretos más íntimos.

 

Se hace urgente y necesario luchar por sus derechos humanos, sus derechos civiles y políticos: por la liberación del niño. Los niños, en la misma medida  que los adultos, son miembros de la familia humana. Los niños no son propiedad de sus padres ni de los estados, ni tampoco son semihumanos en proceso de formación. Los gobiernos están moralmente obligados a conceder todos los derechos humanos a los niños.

 

Desde hace mucho tiempo se considera que discriminar a otras personas por su condición económica, sexo, raza o religión es algo intolerable. Ya es hora de reconocer que discriminar  a un ser humano por su edad es igualmente pernicioso.

 

 

 

los niños no son cosas

 

palabras a un niño

 

convención de los derechos del niño